Jannah Theme License is not validated, Go to the theme options page to validate the license, You need a single license for each domain name.

Alejandro, un analista de Albacete en busca de la fórmula de la felicidad

Alejandro Cencerrado, natural de Albacete, es analista en el Instituto de Investigación de la Felicidad de Dinamarca

Alejandro Cencerrado es natural de Albacete y desempeña su trabajo como analista en el Instituto de Investigación de la Felicidad de Copenhague (Dinamarca). Una peculiar labor que trata de analizar los factores que influyen en la felicidad de las personas con la finalidad de desarrollar políticas que van más allá de cubrir las necesidades de la ciudadanía y que tratan de mejorar la vida de los mismos.

Lo cierto es que Alejandro Cencerrado no empezó a desarrollar su labor como analista de la felicidad en Dinamarca, sino que fue algo que llegó a su vida por casualidad mucho antes. Concretamente “casi 20 años antes de llegar al Instituto de la Felicidad de Copenhague empecé a investigar mi propia felicidad”, explica Cencerrado a El Digital de Albacete.

Alejandro Cencerrado / Imagen: Cedida

La historia de este albaceteño arranca mucho antes de su llegada hasta el país escandinavo. “Con 18 años me di cuenta de que no era feliz, y me prometí a mí mismo serlo, así que empecé a puntuar mi felicidad todos los días en una escala del 1 al 10”, recuerda, y manifiesta que “también tenía un diario donde apuntaba cómo me sentía, con quién había pasado el día y otras cosas para ver qué afectaba a mi felicidad”. Y con este curriculum previo sin quererlo, años más tarde este investigador de Albacete terminó trabajando en el Instituto de la Felicidad de uno de los países más felices del mundo.

Alejandro Cencerrado, natural de Albacete, investiga sobre la felicidad en Dinamarca 

Así, Cencerrado empezó “12 años antes”, tal y como recuerda el albaceteño, a investigar en este área en un momento en el que “tenía los típicos problemas de adolescente, discutía con mis padres, con mi pareja, tenía la autoestima baja, y aunque lo tenía todo para ser feliz, no lo era, y decidí puntuar mi felicidad diariamente”. La oportunidad llegó a la vida de este investigador de Albacete tras mudarse a Dinamarca y finalizar sus estudios. “Tuve varios trabajos hasta que descubrí el Instituto de Investigación de la Felicidad, postulé al puesto, y como llevaba tanto tiempo investigando mi propia felicidad, entré”, recuerda el investigador de Albacete afincado en Dinamarca.

Son muchos los factores a tener en cuenta para investigar la felicidad. Así, Alejandro Cencerrado explica que “los investigadores de la felicidad tendemos a meternos demasiado en los datos y en la teoría, y a veces se nos olvida lo que nos hace felices”, y destaca que “me ayudaba mucho tener los pies en la tierra y centrarme en lo que yo creo que es importante, que normalmente son las relaciones sociales”. 

Alejandro Cencerrado / Imagen: Cedida

“Somos muy felices de cañas, pero la realidad es que no tenemos tiempo para ello”

Sobre el ámbito laboral, el investigador indica que “a veces tendemos a pensar también que la felicidad es que te pongan un tobogán en el trabajo, y quizá lo importante es que tu jefe te valore y tener buena relación con los compañeros”. Además, señala que en España “somos muy felices de cañas, pero la realidad es que no tenemos tiempo para ello”, y añade que “las relaciones laborales en Dinamarca funcionan mejor, el jefe es uno más, y no hay esa distinción entre jefe-empleado que existe en España”.

El investigador aclara que el trabajo “es el sitio en el que pasamos más tiempo despiertos. En España falta también confianza, hay una especie de guerra, el jefe no se acaba de fiar de los empleados”, y señala que “en Dinamarca, los jefes confían más en sus trabajadores, puedes teletrabajar y no importa las horas que trabajes siempre que cumplas con los objetivos”.

Teletrabajo / Foto: Pixabay

En este Instituto de Investigación los factores que miden la felicidad de las personas no los indican los investigadores, sino que “surgen solos, nosotros preguntamos a la gente cómo se siente y a partir de ahí van aflorando los factores que marcan la diferencia”, asegura el analista de Albacete, que subraya que entre estos aspectos que afectan a la felicidad de las personas destacan “las enfermedades graves, tales como la ansiedad o la depresión, y el dinero también; ser más rico de ganar 2.000 euros al mes no afecta, sin embargo, no ganarlos afecta a la felicidad”.

¿Somos felices los vecinos de Albacete?

Finlandia, Dinamarca, Noruega o Países Bajos son tradicionalmente algunos de los países calificados como los más felices del mundo. En contrapartida, en la parte baja de esta peculiar tabla de la felicidad encontramos Afganistán, Líbano o Sierra Leona. A primera vista, las diferencias pueden resultar evidentes, ya que los países menos felices también están entre los países más pobres.

“Cuando llegas cuesta creer que Dinamarca sea uno de los países más felices”, explica Alejandro Cencerrado a El Digital de Albacete, que señala que “hay oscuridad, hace frío, las tiendas cierran muy pronto y la gente también tiene un carácter frío”. Además, explica que “recién llegado no ves esa felicidad, pero con el tiempo te das cuenta de que el Estado ayuda mucho a las personas, mientras que en España estamos en constante conflicto con la corrupción o las ayudas que no llegan”, y manifiesta que “en Dinamarca, por el contrario, sabes que el Estado te protege y lo que pagas en impuestos lo acabas recibiendo. En realidad, lo que te hace feliz aquí no es otra cosa que el Estado de Bienestar, además de otros factores como las relaciones personales y demás”. Así, el investigador asegura que “un danés no es más feliz porque sepa más de emociones o medite más, sino porque el Estado está ahí para él, por ejemplo, para ofrecerle un psicólogo si tiene depresión”.

Albacete / Imagen de archivo

En cuanto a la felicidad de los albaceteños, Alejandro Cencerrado explica que “he vivido en Albacete, Madrid y Copenhague. Puedo decir que vivimos mejor que los madrileños pero peor que los daneses”, y asegura que “la tranquilidad de Albacete o la comodidad son algunos factores clave”. De hecho, el investigador recuerda un pequeño estudio que llevó a cabo sobre los barrios de Albacete más felices, y destaca que “los datos son imprecisos porque no son suficientes para estudiarlo”. Como resultado de este particular análisis, el estudio proclamó al barrio de Medicina “como el más feliz de Albacete”, asegura el investigador.

Alejandro Cencerrado terminó convirtiendo en su profesión lo que llevaba investigando toda su vida; la felicidad, mientras buscaba la manera de llegar a ella. Así, el albaceteño terminó convirtiéndose en uno de los investigadores del Instituto de Investigación de la Felicidad en Dinamarca, uno de los países más felices del mundo, y tratando de buscar cuáles son los factores más importantes que las personas necesitan en su vida para desarrollar políticas que velen por la felicidad y el bienestar de las personas.

Noelia López

Natural de Albacete, Graduada en Periodismo por la Universidad Miguel Hernández. Experiencia en medios de comunicación como VIsión6, Es Radio y Telemadrid
Botón volver arriba