ANPE presentaba en Albacete los datos más relevantes del Informe del Defensor del Profesor en Castilla-La Mancha correspondiente al curso 2023-2024. Un trabajo del que se desprende que durante el pasado curso el Servicio del Defensor del Profesor atendió 98 casos en nuestra región, lo que supone 18 más que en el curso anterior. Además, desde ANPE desvelaban que en Albacete se atendieron un total de 26 casos relacionados con problemas de conciencia en las aulas.
Cabe recordar que el Defensor del Profesor es un recuso exclusivo del sindicato ANPE que ofrece un servicio de atención inmediata y gratuita para todo tipo de profesorado víctima de situaciones de conflictividad y violencia en las aulas, en este caso de Castilla-La Mancha. Así, los últimos datos facilitados reflejan que se ha producido un incremento de un 22,5% de los casos atendidos respecto al curso anterior, incidiendo desde ANPE que este dato también ha experimentado un aumento a nivel nacional, situándose en un total de 2.101, lo que se traduce en 153 casos más de violencia en las aulas denunciados por el profesorado español.
El presidente de ANPE en Castilla-La Mancha, Martín Navarro; acompañando por la responsable del Servicio del Defensor del Profesor de ANPE en Castilla-La Mancha, Genoveva Jiménez; y el secretario de Comunicación de ANPE en la región, Manuel Tébar, desgranaban los datos que se desprenden del último Informe del Defensor del Profesor, en relación a las intervenciones realizadas con docentes de Castilla-La Mancha en relación a la convivencia escolar.
De este modo, consideraban que estos datos “son sólo la punta del iceberg de todos los casos que se producen en los centros educativos de nuestra comunidad autónoma”. En este estudio únicamente aparecen reflejados los resultados que se han trasladado al Servicio del Defensor del Profesor de ANPE, pero sostenían que “la realidad es que se producen más casos de los atendidos”. Igualmente, ponían de relieve que “la complejidad de los casos atendidos aumenta”, al igual que el número de casos atendidos.
Casos denunciados en las aulas de la provincia de Albacete
Albacete se encuentra entre las provincias que encabezan los casos atendidos por el Servicio del Defensor del Profesor en las aulas de la región. De los 98 casos atendidos en Castilla-La Mancha, desvelaban que un total de 26 han sido atendidos en aulas de centros educativos de la provincia albaceteña, tratándose de una cifra que además ha incrementado en un 27%, según los datos aportados por ANPE.
Seguidamente, se encuentra la provincia de Ciudad Real, con un total de 20 casos atendidos y un incremento de un 20%. En Cuenca se atendió un 8% más de casos respecto al curso anterior, suponiendo 8 nuevos; mientras que en Guadalajara se detectaron 9 casos y en Toledo 35.
La Educación Primaria cuenta con la mayoría de estos casos
En relación en los niveles educativos en los que se han registrado estos casos por parte del Defensor del Paciente de ANPE en Castilla-La Mancha, detallaban que “han aumentado en casi todos los niveles”, haciendo especial hincapié en el caso de la Educación Primaria. En este punto, se extrae del informe que se ha pasado de 33 a 44 casos atendidos, lo que se traduce en un aumento del 3,65%, ya que los niveles de Primaria se sitúan en un 45% de los casos atendidos.
Igualmente, destacaban que en la etapa de Educación Infantil el aumento ha sido solo de un caso, pasando de 6 a 7 en las aulas de Castilla-La Mancha. En el caso de la etapa de Secundaria, desde el Servicio del Defensor del Profesor de ANPE en Castilla-La Mancha subrayaban que el aumento ha sido también de un solo caso, pasando de 33 a 34.
En cuanto a los Ciclos Formativos se ha pasado de 5 a 9 casos y en la FP Básica de 2 a 4. Por contraposición en otras enseñanzas ha sido el único nivel educativo en el que se ha detectado una disminución de los casos, ya que desde ANPE confirmaban que “no se ha producido ningún caso”.
Destacaban desde ANPE que en la realidad de los centros educativos “es evidente el aumento de carga burocrática que padecen nuestros docentes durante los últimos cursos académicos y que no redunda en una mejora de la calidad educativa”, ya que aseguran que “llega a convertirse en un obstáculo del proceso enseñanza-aprendizaje”. Todo esto, aseguran que influye “en la desmotivación que sufren algunos docentes, llegando a plantearse el abono de la profesión, por la sobrecarga burocrática a la que están sometidos; lo que se traduce en los altos índices de ansiedad, depresión y bajas relacionadas con problemas de salud mental”, detectados por el Servicio del Defensor del Paciente de ANPE en Castilla-La Mancha.
En concreto, trasladaban que un estudio llevado a cabo por ANPE y SATSE, centrado en la salud mental en las aulas en 2024, determinó que “8 de cada 10 docentes encuestados consideraban que el exceso de burocracia es el principal factor que afecta a la salud mental, seguido de los problemas de convivencia en las aulas y las elevadas ratios”. Al respecto, apuntaban que en lo relacionado con el estado anímico del profesorado de Castilla-La Mancha “el mayor aumento se produce en los docentes con depresión”, desvelando que “se duplica el número de casos atendidos, pasando de 6 a 12”.
Se incrementan las agresiones a profesores en Castilla-La Mancha
Igualmente, detallaban que “los docentes que padecen ansiedad aumentan ligeramente, pasando de 34 a 36”. Por el contrario, incidían en la disminución de los profesores que se encuentran de baja debido al problema que están sufriendo en los centros educativos, reduciéndose en un 50%.
En lo que se refiere a problemas con el alumnado, trasladaban desde ANPE que han aumentado los problemas para dar clase pasando de 22 a 26. Pero también confirmaban que se han incrementado “las agresiones de alumnos a profesores de 13 a 17, las faltas de respeto (de 17 a 29). Igualmente, recordaban que “el acoso ha pasado de 5 a 7 casos; las amenazas de 5 a 10 y los daños a la propiedad de los profesores de 3 a 6”.
Por el contrario, trasladaban que se ha detectado una disminución de las conductas agresivas entre alumnos en un 50%; el ciberacoso se ha reducido de tres a un caso y las falsas acusaciones han desaparecido.
También ponían el punto de mira desde el Defensor del Profesor de ANPE en los problemas vinculados con las familias de los alumnos. En concreto, desarrollaban que al analizar los casos de problemas relacionados con los padres, “aumenta el ciberacoso”. De este modo, exponían que “se han dado 24 casos de acoso, 23 faltas de respeto hacia profesores y 27 casos de falsas acusaciones”, siendo este último apartado el que ha registrado un mayor aumento. En el lado opuesto han descendido los casos de agresiones físicas al profesorado, las denuncias en el centro/inspección y en la presión ejercida para modificar las notas.
Con respecto a las actuaciones realizadas 84 docentes de Castilla-La Mancha han recibido asesoramiento por parte del Servicio del Defensor al Profesor de ANPE, y un total de 71 apoyo psicosocial. Además, 48 docentes han solicitado a este servicio asesoramiento jurídico, teniendo que personarse en la Administración dos de los casos y en uno de ellos ha sido precisa la intervención del delegado. Mientras que 26 profesores han recibido desde el Servicio del Defensor de ANPE información relacionada con la legislación vigente.
Propuestas de mejora en Castilla-La Mancha
Por todo ello, desde ANPE trasladaban una serie de propuestas de mejora para continuar mejorando la convivencia en los centros educativos de Castilla-La Mancha. La primera de ellas pasa por “el replanteamiento, revisión y revitalización de la Unidad de Atención al profesorado”, así como la “revisión, modificación y actualización del Decreto de Convivencia de 2008 de Castilla-La Mancha”.
Igualmente ponían de manifiesto la necesidad de la inclusión en la Ley de Autoridad de aspectos como “la obligatoriedad de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha de personarse como acusación particular ante casos de agresiones a docentes, seguro de cobertura de daños materiales y personales derivados de la labor docente y la protección y presunción de veracidad del profesorado ante las decisiones pedagógicas, principalmente las referentes a la evaluación”.
Además, hacían hincapié desde ANPE en promover “campañas de sensibilización y protocolo de actuación frente a los distintos tipos de violencia y acoso a los docentes, la reducción de burocracia, y un plan específico de formación del profesorado para la prevención y detección de conflictos relacionados con la convivencia escolar”. En relación a estas medidas de prevención también destacaban “programas de prevención de acoso escolar que contemple la aceleración de los protocolos de protección a las víctimas y un plan de detección precoz de los problemas de convivencia en los centros educativos”, así como “el reconocimiento de la ansiedad, la depresión y el estrés como enfermedades profesionales de los docentes de carácter psicosocial siempre que se deriven de situaciones de acoso, y que se consideren estas situaciones como accidentes laborales”.
De este modo, compartían desde ANPE la necesidad de contar con un Plan de acompañamiento psicológico para el profesorado, programas de intervención/educación con agresores, víctimas y espectadores, la puesta en marcha y recuperación de las aulas de convivencia en los centros que lo requieran, y la necesidad de más especialistas en los centros.
Igualmente, ANPE recordaba a la sociedad la importancia de tener “tolerancia cero en cualquier tipo de violencia, respetar la labor del profesorado, dignificar la figura del docente y utilizar los cauces establecidos en los centros para comunicarse con los profesores”. Igualmente, recordaban que ANPE “va a estar al lado del profesorado y no dejará impune cualquier tipo de violencia, acoso o amenazas hacia los docentes, o denuncias falsas que empañen la dignidad de los compañeros”.

/Fotos: Miguel Ángel Romero/