La situación en algunas localidades valencianas tras el paso de la DANA continúa siendo completamente devastadora tras una semana. En estos pueblos afectados, muchos de ellos zona 0 de la catástrofe, se encuentran algunos vecinos de Albacete, residentes en localidades como Paiporta o Catarroja. Es el caso de Amaya Villalba Ibáñez, muy vinculada a Cenizate (Albacete), y cuya residencia habitual se ubica en Paiporta (Valencia).
Un caso sobrecogedor, ya que a esta albaceteña embarazada de 7 meses, la DANA la sorprendió sola en su vivienda. Una situación que ella misma define como “terrible y dramática a más no poder”.
“Me pilló en casa, embaraza de 7 meses”, recuerda Amaya, todavía sobrecogida por la situación, y explica que “por la ventana veía pasar el agua por un parque de niños a más de un metro de altura”. “No llovía apenas, y en Paiporta estamos acostumbrados a que llueva torrencialmente pero no a que el barranco se desborde de esta manera”, manifiesta, y añade que “estamos sin luz y sin agua”. La situación es “totalmente devastadora”, asegura a El Digital de Albacete.
“Ni se te ocurra salir, ahora no podemos”
Por suerte, y tras casi una semana, Amaya ha conseguido salir de Paiporta, debido al alto riesgo que supone esta situación ante un embarazo tan adelantado y se ha trasladado hasta Cenizate, donde reside parte de su familia y donde Amaya creció durante buena parte de su infancia. “Mientras las calles se llenaban de agua llegué a pensar que me podía poner de parto y le repetía a mi bebé: ‘Ni se te ocurra salir, ahora no podemos”, explica, al mismo tiempo que recuerda que “un chico que iba saltando de coche en coche a las 8 de la tarde, cuando ni siquiera había sonado la alarma. Le tuvieron que ayudar desde un primer piso con una sábana para que pudiera subir porque los coches se iban apilando y no podía salir de ahí”.
Amaya explica que esta situación ha dado lugar, con el paso de los días, a “un olor a putrefacción horrible”, y señala que “hay que tener en cuenta que hay gente que no puede salir de su casa todavía porque tienen una montaña de coches en la puerta”. Respecto a su garaje, Amaya explica que “se ha inundado alguna vez, pero nunca jamás de esta forma. Sigue lleno de agua, y no sé si van a encontrar personas”, y manifiesta que “las puertas de los garajes están reventadas, y hay verdaderas montañas de vehículos, además de barro, cañas y tierra. Todavía nadie ha ido a quitar nada”. “Con las primeras limpiezas de voluntarios que vinieron a ayudarnos la gente pudo empezar a salir porque no se podía ni andar”, señala a El Digital de Albacete.
“El agua está contaminada, no es potable”
La albaceteña, afincada en Paiporta, señala que “los garajes continúan llenos de agua una semana después”. Además, explica que “en Paiporta cuando llueve torrencialmente los garajes se suelen inundar alrededor de 20 centímetros, por eso no es raro que la gente baje para sacar los coches a la calle”.
Sobre la situación de los últimos días, Amaya apunta que “teníamos agua, pero está contaminada, no es potable”, y señala que “tampoco teníamos cobertura”. En lo relacionado a la multitud de personas voluntarias que se han desplazado para ayudar a los municipios afectados, Amaya explica que “con un cubo y una pala han venido verdaderos ríos de personas desde Valencia”, y añade que “hasta el viernes no vi Policía ni a nadie, y eso que vivo en la zona más accesible. La gente aparcaba allí y se iba andando 3 kilómetros, se han volcado una barbaridad”.
“No podía andar 3 kilómetros en mi estado”
En la tarde de este pasado lunes, 4 de noviembre, Amaya pudo salir de Paiporta para regresar a Cenizate, debido al alto riesgo de infección y su estado de gestación. “Estaba sola, y vino un chico andando para estar conmigo el viernes. Como el domingo vinieron los Reyes, hemos podido pasar con el coche porque no puedo andar 3 kilómetros en mi estado”, explica, y manifiesta que “tuvimos que poner un cartel para señalar que el coche funcionaba y no lo apartasen. Es lamentable pero es así, es algo que no piensas hasta que te pasa”. “Hemos recogido los trastos y nos hemos ido. Volveré a Valencia porque tengo pruebas médicas, pero necesito descansar. Al llegar a Cenizate me he dado cuenta de que he pasado una semana en estado máximo de alerta”, indica a El Digital de Albacete.
En lo relacionado a las carreteras, Amaya señala que “la zona de Chiva está cortada dirección Valencia, Requena estaba mejor”, y destaca que “por lo menos he visto que estaban en ello, y que iban camino de las zonas afectadas efectivos de bomberos y del ejército”.
Sobre la tensa situación que vivió Paiporta con la visita de los Reyes y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Amaya explica que “la gente está frustrada porque ha pasado mucho tiempo sin que nadie haga nada. Hay un enfado terrible, hay muchos fallecidos y demasiados desaparecidos”, y subraya que “eso no es Paiporta. Esa violencia y esa actitud salvaje no es mi pueblo. No conozco a los 25.000 habitantes, pero eso no es Paiporta”.
Por el momento, y debido a su embarazo, Amaya permanecerá en Cenizate (Albacete) hasta poder regresar a Valencia. Ahora, esta albaceteña respira aliviada de poder haber salido del infierno que continúan viviendo los vecinos de Paiporta, aunque asegura que regresará lo antes posible a su casa.
