Con la Liga ya iniciada y la confección de la plantilla del Albacete Balompié prácticamente cerrada es tiempo de analizar el mercado de fichajes de este verano del conjunto blanco, que en mi opinión, se puede calificar con un notable alto ya que los jugadores incorporados superan las expectativas y gran parte de las llegadas mejoran, con mucho, la mayoría de las salidas.
No ha sido fácil, el Albacete Balompié se lanzaba al mercado con la categoría salvada de milagro y con menor presupuesto, lo que hacía que a priori la entidad contara con menos posibilidades en pugna con otros equipos. Por otro lado, la salida de Fuster y Olaetxea se antojan dos grandes bajas difíciles de suplir y jugadores de escaso rendimiento y gran sueldo no ponían fácil su salida del equipo.
Con toda la prudencia, y hablando solo de las incorporaciones, he de decir que personalmente me parecen unos cimientos sólidos jugadores como Lizoain bajo palos, que mejora con mucho técnicamente a cualquiera de los dos porteros con lo que se comenzó la pasada campaña y físicamente a Tomáš Vaclík. En la zaga, Jon García me parece un defensa que por su trayectoria dará un gran empaque y oficio al centro de la defensa. Rueda es más una incógnita, pero aquí confío en el criterio de un entrenador acostumbrado a trabajar con jóvenes talentos y sacarles el máximo. Siguiendo en defensa me sorprendió gratamente el fichaje de Jaume Costa, que sobre el papel podría parecer inalcanzable y que acumula una cantidad de partidos en primera y segunda, por lo que lo único que puedes hacer ante ello es descubrirte, disfrutar de su fútbol y de ese olfato que te da tener los h… pelaos.
Otra incorporación interesante es la de Diego González, mucha experiencia y talento para un jugador que usa las dos piernas en el centro de la defensa. Menos mal que salió Glauder, que con eso de ser zurdo no había quien lo sentara en el banquillo. Se nota que se ha querido dar veteranía y cuchillo entre los dientes a la línea más débil del equipo la pasada campaña.
Ros y Álvaro Rodríguez son dos viejos conocidos atrás. De Álvaro poco que decir que no se sepa, me parece un buen jugador, cumplidor y sin duda brillará más con más ayudas defensivas que antes. En cambio Ros, para mi, es la eterna moneda al aire. Una veces cara, y otras cruz. Más de lo segundo que de lo primero. Demasiado poco fiable, en mi opinión. Ahí pondría un debe a falta de ver al recién anunciado Lalo Aguilar, que llega cedido del Leganés.
En lo que al mediocampo y ataque se refiere es donde tendremos que ver si realmente se ha suplido bien a Fuster y Olaetxea. Riki debe dar un paso adelante y desplegar su mejor juego, este debe ser su año y dar un golpe encima de la mesa para dotar de personalidad la media, que en la zona ofensiva tiene jugones como Fidel, Higinio y Quiles a los que se ha sumado Morcillo, para mi colosal fichaje. Pero más sorprendente es la llegada de Lazo, otro fichaje a priori llamado a marcar las diferencias y que sobre el papel parece un gran acierto. Quizá sí que podría echar en falta un “stopper”, veo muy ofensivo el perfil de los jugadores y no veo a Rai en esa labor. Veremos que inventa Alberto en esa posición cuando haya que achicar agua y defender los resultados. De la salida de Escriche poco que decir, le deseo la mayor de las suertes pero el Alba no podía mantener a un delantero con poco gol y con una ficha tan alta. Fue una apuesta de Albés que salió mal. A Gijón no se lo ha llevado, claro.
Así pues, creo que Skyline y Toché han puesto una plantilla competitiva en manos de Alberto González para luchar por la permanencia en una categoría que este año es tan preciosa como difícil. Así que al César lo que es del César, se critica cuando se falla, se resalta cuando se acierta. Creo que este año se ha acertado con los fichajes y no me duelen prendas en reconocerlo.
Javier Romero
Director de El Digital de Albacete