Rodar una película era el sueño del escritor Emilio Ortiz, natural de Barakaldo y afincado en Albacete desde hace 25 años. Un sueño que ha hecho realidad pese a ser invidente, demostrando que las barreras están para derribarlas y las metas para conseguirlas.
En tan solo unos días dará comienzo en Albacete el rodaje de ‘El gigante de los pies de barro’, que será el primer cortometraje de Ortiz y al que darán vida los actores Mafalda Carbonell, Julio Espinosa y el albaceteño José Manuel Maciá. Un proyecto cinematográfico que pese a su corta duración, apenas cuatro minutos y medio, trata un tema con un gran trasfondo como es el acoso.
Un sueño de la infancia que hará realidad en Albacete
“Antes que la idea surgieron las ganas”, trasladaba Emilio Ortiz a El Digital de Albacete sobre este nuevo proyecto artístico. Al respecto, desgranaba que “siempre me ha gustado el cine y he sido un gran espectador cuado tenía resto visual e incluso después”, añadiendo que “siempre soñé desde pequeño con dirigir una película”, ya que lo suyo es crear narrativa y estar detrás de las cámaras porque “la interpretación siempre me ha resultado muy difícil, quizá porque soy bastante tímido”.
De la pluma de este albaceteño de adopción han nacido un total de siete publicaciones literarias, libros y relatos gracias a los que Emilio Ortiz cuenta con un gran bagaje artístico. Consideraba que “escribir libros es una forma muy bonita de contar historias”, reconociendo que sus creaciones, en cierto aspecto “son algo cinematográficos”. En este punto, confesaba a El Digital de Albacete que “incluso he llegado a pensar que me hice escritor porque tenía dentro de la cabeza que no podía ser director de cine por el hecho de ser invidente”.
Sin embargo, fue precisamente el mundo de la literatura el que poco a poco fue poniendo en su camino a diferentes profesionales del cine. Una de estas personas con las que se topó Emilio Ortiz fue el videoartista Víctor Meliveo, quien “también tiene un importante déficit de visión y ha hecho muchos videoclips e incluso ha trabajado con Antonio Banderas”, explicaba el escritor afincado en Albacete.
De su amistad con Meliveo nació la petición de “escribir un guion para un corto de videoarte que interpretaba el actor malagueño José Manuel Lara y salió muy bien”, detallaba Ortiz. Tal es así que confesaba que gracias a esta experiencia “me picó el gusanillo y escribí otro microguión en el que han participado, entre otros, Dani Rovira y Serafín Zubiri”.
Elenco que dará vida a este corto que se rodará en Albacete
Tal fue así que “un día, creando narrativa, decidí escribir un guion y me salió un mediometraje”, confesaba Emilio Ortiz. Sin embargo, con los pies en la tierra decidió optar por dar vida a un cortometraje y “empezar a tratar esta disciplina artística a la que no estoy acostumbrado desde lo pequeñito”, sostenía. A medida que iba creando este corto “fui poniendo cara a mis personajes” e incluso llegó a contactar “con Mario Casas, pero por tema de agenda no pudo sumarse al proyecto”.
Ahora Emilio Ortiz ya ha construido por completo este corto y forman parte del mismo un reparto de actores de primer nivel. La joven Mafalda Carbonell será la protagonista de este corto, actriz que ha trabajado bajo las órdenes de Juanma Bajo Ulloa o Álex de la Iglesia. También formará parte del elenco el profesor de interpretación y actor, Julio Espinosa; y el albaceteño José Manuel Maciá, actor albaceteño con gran proyección internacional que ha trabajado con profesionales de la talla de Liam Neeson.
Desvelaba que lleva inmerso en la preproducción de este corto con ADN albaceteño “cerca de un año”, y relataba que el canal temático de YouTube, ‘Alucine835’, está produciendo un making off, que será dirigido por Hugo Bustos, un joven cineasta que Emilio Ortiz conoció precisamente durante el proceso de preproducción.
El autor trasladaba que “la ONCE ha hecho un aporte extraordinario en cuanto a medios materiales” con el objetivo de que este corto sea una realidad, pero incidía en que “todavía nos quedan por cubrir algunos gastos porque es un cortometraje profesional”. La película cuenta con un presupuesto cercano a los 9.000 euros, y buena parte de los mismos se han cubierto mediante micro patrocinios y mecenazgo.
“Estamos haciendo un crowdfunding y estoy ofreciendo hacer publicidad a pequeñas empresas de Albacete que quieran participar”, explicaba Ortiz a El Digital de Albacete. Al respecto, confesaba que “me gustaría que fuera un proyecto cultural participativo, incluso dar más de lo que recibo”.
‘El gigante con los pies de barro’ se rodará en un instituto de Albacete
‘El gigante con los pies de barro’ comenzará a rodarse el próximo 22 de julio y tendrá como escenario principal “un instituto de Albacete”, confirmaba el autor. Este cortometraje que se rodará de forma íntegra en la capital albaceteña tiene una duración de “cuatro minutos y medio”, pero cuenta con un profundo trasfondo.
Al respecto, desgranaba Emilio Ortiz que “trata un tema con un gran trasfondo como es el acoso hacia a una menor”. Una temática que sostenía ataja “de una manera poco explícita y muy sutil, incluso me atrevo a decir que como creador de historias lo que he querido es plasmar el asunto de forma artística para que sea el espectador quien juzgue y no convertirme yo ni en juez ni en parte”.
Más allá de este tema que centra el corto, desvelaba Ortiz que “también hay un conflicto importante entre dos personajes que pertenecen a jerarquías distintas dentro del ámbito académico y que les genera otro conflicto interno”. De este modo, esperaba el autor de esta pieza cinematográfica que se rodará en Albacete que “que peguemos un pellizquito en el alma de los espectadores cuando lo vean”.
“Albacete me ha dado muchísimas cosas, pero en cuanto al arte me lo ha dado todo”
“Prácticamente llevo viviendo en Albacete la mitad de mi vida”, confesaba Emilio Ortiz, quien nació en Barakaldo pero que tras 25 años residiendo en la ciudad aseguraba sentirse “un albaceteño más”. De este modo, manifestaba que “Albacete me ha dado muchísimas cosas, pero en cuanto al arte me lo ha dado todo”, destacando que “nací aquí como escritor y mi primer libro lo publiqué y lo presenté aquí. Todo se lo debo a los lectores de Albacete”.
Tras contar con varias publicaciones literarias ahora decidía embarcarse en esta nueva aventura cinematográfica que volverá a tener a la ciudad de Albacete como protagonista. “He hecho todo lo posible por rodar el corto en Albacete y que en el mismo haya presencia de Albacete”, subrayaba y advertía que “es mi primera película, pero no sé si será la última”.
Explicaba que a nivel personal “es un reto y supone dar rienda suelta a una necesidad artística que tenía”. Pese a todo, concretaba que “creo que no me voy a dedicar en exclusiva a esto porque considero que es muy difícil que una persona ciega total se pueda dedicar a esto”, exponiendo que “que voy a intentar demostrar que puedo hacer un cortometraje profesional, pero dedicarse a esto es otra cosa”.
“Barreras hay, pero están para derribarlas”
Confesaba que este proyecto ha sido todo un reto artísticamente hablando, pero ser invidente no ha supuesto ningún freno a este albaceteño de adopción para rodar su primer cortometraje. Al respecto, ponía de relieve que “barreras hay, pero están para derribarlas y para demostrar al mundo que podemos saltarlas”, apuntando que “no me he desanimado nunca”.
Sin embargo, compartía con El Digital de Albacete que recorrer este camino no ha sido fácil, y es que “he llegado a proponer el tema a personas o instituciones que me han dicho que no, que no consideraban que una persona ciega pudiera ser capaz de dirigir una obra cinematográfica pese a su bagaje artístico”. Pero pese a estas negativas, confesaba que “también me he llevado sorpresas muy gratas de gente que desde el minuto cero se ha sumado al proyecto”.
Así, Emilio Ortiz se ha embarcado en un nuevo y emocionante artístico que pretende poner a Albacete como escenario de un corto cinematográfico y con el que demostrar que no hay barreras que te detengan si quieres cumplir un sueño.