Con la permanencia virtual en el bolsillo tras obrar Alberto González el milagro desde que llegó al Albacete, los blancos tienen el próximo lunes la oportunidad de sellarla de manera definitiva y matemática si cosechan un buen resultado en Villarreal ante el filial del Submarino Amarillo. De sumar una victoria, ésta sería la sexta consecutiva y seguiría agrandando el récord ya conseguido por el entrenador malagueño, que llegó tras la destitución de Rubén Albés y que en 7 partidos ha hecho que el Alba haya pasado de ser un equipo muerto que tenía pie y medio en Primera RFEF, a ser a día de hoy el conjunto más en forma junto al Real Valladolid de toda la Segunda División y, salvo hecatombe, continuar un año más en la categoría de plata del fútbol nacional.
Volviendo a lo que se refiere al partido ante el Villarreal B, una victoria el lunes en ‘La Cerámica’ significaría conseguir el objetivo perseguido durante toda la temporada a falta de dos jornadas, situación inimaginable cinco jornadas atrás, las que coinciden con las victorias seguidas del Alba. “¿Ganar el lunes? Sería objetivo cumplido. Y con la posibilidad de disfrutar más en la amplitud de la palabra lo que es de la categoría la próxima temporada, del final de Liga con los deberes hechos. Sería un motivo de satisfacción y de tranquilidad”, indicó Alberto González este viernes en sala de prensa.
El malagueño añadía ante los micros que “la alegría se palpa. La gente está disfrutando del momento. De acabar una temporada sufriendo con el agua al cuello a terminar con esta confianza y con el rendimiento que se está dando… Se nota que se respira una alegría especial. Se nota. No creo que se confunda con confianza excesiva. Se está trabajando bien”.
El Alba puede estar casi salvado al saltar al campo del Villarreal B, una situación que ni valora Alberto. “Pienso en nosotros y que hagamos una Liga muy muy buena y lo mejor que podamos. Plantearemos el partido como hasta ahora, queriendo ganar un partido más. Cerrar bien la temporada. No es cuestión solo de conseguir el objetivo, por supuesto, sino cerrar bien la temporada”.
Aunque, como siempre, Alberto mantiene los pies en el suelo, pues el reto, una vez más, no se antoja sencillo. “Todo el mundo se juega cosas ahora. El otro día vino el Leganés con la posibilidad de ascenso directo, la semana anterior el Andorra se jugaba la salvación. Es lo que toca. Todos estamos con muchas cosas en juego. Debemos saber convivir con ello”, relató.
El entrenador del Albacete espera un Villarreal B imprevisible
En cuanto al partido en sí, Alberto espera un equipo imprevisible en toda la amplitud de su término. “Los jugadores jóvenes con muchísimo talento es lo que tienen, que son capaces de lo mejor, pero a la vez puede ser algo más inconstantes. Esa falta de madurez o consistencia, dependiendo de cómo se ponen los partidos, es lo que tiene. Pero por capacidad de ellos no es”, analizó.
“Frenar esos golpes de capacidad que tienen debe ser nuestro objetivo. Son muy buenos cuando encuentran jugadas con espacios, en el uno contra uno. Tienen capacidad para desarbolar defensas que no estén bien armadas, disparar, definir. Tenemos que hacer que no nos puedan sorprender”, prosiguió el entrenador del Albacete.
Sobre la situación de su propia plantilla, Alberto admitió que la única duda es la de Álvaro Rodríguez, estando disponibles el resto de futbolistas, incluido un Djetei que ha vuelto a recuperarse de manera increíble. “Valoraremos en último momento si podemos contar con Álvaro. El resto de jugadores están disponibles”.
Como ocurre desde que Alberto llegó al Albacete, una vez más, es una verdadera incógnita el posible once. “Para mí es importante que todos estén conectados y sepan que pueden sumar. Todos suman, aunque no participen. Todos trabajan bien. Y generan la competencia necesaria para que todos den lo máximo. Ni yo tengo clara la alineación”.
Y acabó, Alberto, refiriéndose a una afición que una vez más demostrará su amor por el Alba, desplazándose a Villarreal en números que rondarán el millar a pesar del fatal horario establecido por la Liga, pues un lunes a las 20.30 horas no es lo más propicio para que los seguidores se desplacen desde Albacete. Sin embargo, la afición del Alba nunca falla y sobre ella manifestaba Alberto que “nos hemos sentido muy arropados desde el día uno que llegué aquí. Equipo y afición han ido de la mano. La afición ha hecho lo que me correspondía. Estamos encantados y nos han apoyado pese a las dificultades. Que un lunes laborable se desplace tanta gente es de agradecer”.