El Teatro Circo se llenaba de música hace unas fechas gracias a las cuerdas de la Orquesta de Guitarras de Albacete. Una agrupación musical novedosa que une las notas musicales de estos instrumentos en una única voz a base de trabajo y de puro talento.
Una jornada muy peculiar para los espectadores que visitaron el Teatro Circo de Albacete, compuesta por músicos y bailarines albaceteños, que ponían de manifiesto el gran nivel y el buen hacer de la ciudad en estos ámbitos.
Un espectáculo de marca Albacete compuesto por guitarristas exalumnos del Conservatorio Profesional de Música de Torrejón y Velasco de Albacete y alumnos de danza contemporánea, clásica y española del Conservatorio Profesional de Danza José Antonio Ruiz, capitaneados bajo la dirección artística de Olga Fernández. Una fusión que hizo las delicias auditivas y visuales de un público emocionado bajo las estrellas del Teatro Circo de Albacete.
Treinta y tres guitarras en una única voz
“Es algo muy novedoso”, explica la directora de la Orquesta de Guitarras de Albacete, Olga Fernández a El Digital de Albacete. “La gente se va de los conciertos llena de sorpresas y admiración”. Una orquesta especial y diferente, compuesta por 33 guitarristas y formada por multitud de albaceteños de la ciudad y de provincia, que unen estos instrumentos para crear un espectáculo singular. “La gente está acostumbrada a escuchar la guitarra de forma popular o solista”, apunta la directora, que pone de relieve la dificultad de “juntar tantas guitarras en una voz”.
Casi únicos en su especialidad, Albacete cuenta con una orquesta de guitarras especial, de las que “solo hay dos o tres por España”, tal y como puntualiza Olga Fernández. ‘Ecos del Atlántico’ es el espectáculo que presentaba la Orquesta de Guitarras de Albacete, en una actuación íntegra donde “hemos querido unificar musica y danza”, confiesa Olga Fernández, con la finalidad de “enriquecer nuestro espectáculo”.
La danza y la música no se entienden una sin la otra, puesto que son inseparables casi por definición. Por ello, desde la Orquesta de Guitarras albaceteña llevaron una propuesta muy especial al Conservatorio Profesional de Danza José Antonio Ruiz para contar con los maravillosos bailarines, que completan un espectáculo lleno de danza y música.“Hace un par de años se lo propusimos a la directora y desde ahí ha ido creciendo, siempre dispuestísimos y han colaborado siempre encantados”, asegura la directora de la orquesta, y apunta que “nosotros felices de que estos profesores nos cedan una parte de sus clase para preparar este repertorio”.
‘Ecos del Atlántico’
‘Ecos del Atlántico’ es el repertorio elegido en esta ocasión. “Un repertorio grandísimo”, afirma Olga Fernández, adaptado al sonido de más de una treintena de guitarras, “que pasa por distintos países, y hace un recorrido musical por ellos”, puntualiza la directora. “Comenzamos con un vals, y nos adentramos en este mundo que cruza el Atlántico. La segunda parte la quisimos dedicar a Argentina y España, y a ese gran vínculo que tenemos entre los dos países, y que nos une a pesar de la distancia”, explica el alma mater de la orquesta.
Un repertorio engrandecido, en el que la Orquesta de Guitarras de Albacete ha incluido una gran “diversidad de instrumentos para que el concierto sea un gran espectáculo y se vea el gran abanico de piezas que se puede llevar a cabo con las guitarras”, explica la directora de la orquesta, quien añade que “abarcamos mucho repertorio porque queremos llegar a la gente. Para nosotros lo más importante es que las guitarras lleguen al alma de las personas, y creo que lo conseguimos”, señala Olga Fernández, cabeza de la orquesta junto a Alberto Tena. “Después mucha gente nos dijo que hay algo especial en lo que hacemos, que va más allá de la música, y esto es lo que nos llena”, sentencia la directora.
Reencuentros entre guitarras
Guitarristas que un día fueron alumnos, vuelven para reencontrarse entre guitarras con compañeros y profesores. “Prácticamente todos son músicos de Albacete y provincia. Estamos muy felices de haberlos reunidos a todos”, confiesa Olga Fernández, alma mater de este proyecto, que recuerda que “en la orquesta hay gente que empezó conmigo con ocho años. Hay un vínculo tan grande que siguen con nosotros y vienen los fines de semana a ensayar”. Con caminos diferentes, e incluso con kilómetros por medio, muchos de los guitarristas regresan a casa cada fin de semana para ensayar y dar lo mejor de sí mismos en el escenario. “Es difícil juntarnos todos, conseguir que las piezas lleguen a su calidad. Después la satisfacción es grandísima, ver que el esfuerzo y el trabajo han dado resultado y cómo suena esa orquesta”, manifiesta la directora, que confiesa que compartir escenario con quiénes un día fueron sus alumnos “es lo que le da sentido a mi trabajo. Es mi recompensa al trabajo de tantos años. Hoy son grandes músicos y grandes personas, porque para ser buen músico, hay que ser buena persona”.
A los guitarristas y bailarines, se unía un grupo de solistas para completar la magnitud del evento. El violinista Javier Sánchez, Adolfo Almendros al saxofón, la guitarra flamenca de Antonio Bernal, el oboe de Moisés García y las voces de las sopranos Lucía Escribano y Elisabet Culebras, son solo algunos ejemplos de los grandes profesionales que sonaron la noche del sábado en el Teatro Circo de Albacete.
Una orquesta de guitarras con “un sonido tan puro y tan frágil, tan parecido a la voz humana, que llega profundamente a la gente, y eso es lo que nos motiva a seguir adelante, pese al gran trabajo”, tal y como explica su directora Olga Fernández, y un espectáculo que ya se ha convertido en casi una tradición para el Teatro Circo de Albacete.
Más de una treintena de guitarras y un sinfín de bailarines pisaron el Teatro Circo de Albacete poniendo de manifiesto el buen hacer y los buenos profesionales que forman parte de la cultura albaceteña. Una apuesta innovadora y especial que reunió dentro y fuera del escenario a alumnos, profesores, exalumnos y profesionales para hacer lo que más les gusta y dar al público albaceteño la mejor versión de sí mismos.