Musa es una perra que tiene 3 años y medio y ha estado en Albacete visitando a sus familiares. Ángela, su dueña, lleva meses atenta a las novedades de la Ley de Bienestar Animal para poder viajar con Musa en tren. Ángela es de Albacete, pero reside en Madrid, y le resultaba muy complicado encontrar una forma de viajar con su mascota cuando visita a sus familiares a Albacete.
Después de mucha espera, por fin se permite viajar a perros de menos de 40 kilos en algunos trenes de Renfe. Lo que Ángela no se esperaba es que al llegar a la estación de tren de Albacete nadie supiera que viajaba acompañada de Musa.
El primer viaje de una mascota de menos de 40 kilos desde Albacete
Ángela y Musa se disponían a volver a Madrid, este domingo 17 de diciembre, desde la estación de tren de Albacete. Era la primera vez para el personal de Renfe en Albacete que iba a subir a bordo de uno de sus trenes una perra de menos de 40 kg y les pilló por sorpresa. “Al llegar a la estación, ni el personal de seguridad ni de Renfe sabía que ya estaba activo el servicio para perros de hasta 40 kilos para viajar en AVE desde Albacete”, cuenta Gonzalo Tebar, padre de Ángela, a El Digital de Albacete.
Según el padre de Ángela, tanto para los trabajadores de Renfe como para los miembros de seguridad, era el primer perro de estas magnitudes que montaba a bordo de un tren en Albacete. “Mi hija llevaba en el billete que viajaba con una mascota de hasta 40 kg”, cuenta Gonzalo.
Al comprobar el billete, desde la estación de Albacete se pusieron en contacto con Madrid y hablaron con el interventor del tren. “Fue un ‘show’, todo el mundo buscando cómo era la normativa”, cuenta el padre de Ángela. El interventor del tren confirmó que podía viajar y que todo estaba en orden. Los perros que cumplen estas características pueden viajar en algunos trenes de Renfe si llevan un kit con una funda para el asiento, ya que debía viajar en el asiento como cualquier otro pasajero.
El tren en el que iba a viajar Ángela con su mascota era un AVE con trayecto Alicante-Madrid. El interventor del tren comentó que desde Alicante a Madrid o de Madrid a Alicante sí se había subido alguna vez un perro de estas características, pero que en Albacete era la primera vez. “Al final todo fue bien, viajaron sin problemas y llegaron a Madrid”, cuenta Gonzalo
Las novedades de la normativa animal pillaron desprevenidos a estos trabajadores de la estación de Albacete, aunque todo quedó en una divertida anécdota.