Carlos Sobera presenta el conocido programa de televisión para encontrar el amor. Gente de todas partes de España va hasta el restaurante de First Dates con la ilusión de encontrar a su media naranja. En este programa se han vivido citas realmente surrealistas y que ya son historia reciente de la televisión. Son muchos los castellanomanchegos que han visitado First Dates en busca del amor, el último ha sido Juan.
Este hombre natural de Miguelturria, Ciudad Real, es productor teatral y lleva un musical infantil. Helena, su cita, es una mujer de Madrid, a la que no le gusta nada la vulgaridad. Si puede elegir, prefiere que sus pretendientes no sean calvos, “me dan como miedo, parece que se van a hacer daño, tampoco que tenga barriga”, cuenta Helena al presentador antes de conocer a Juan.
Este castellanomanchego se presentó en el restaurante con un pañuelo muy especial, se trataba de un pañuelo rosa de sensibilización contra el cáncer, ya que ha vivido muy de cerca esta enfermedad. A su cita no le ha gustado mucho el aspecto con el que ha acudido Juan a First Dates. “Coco Chanel decía que no hay una segunda oportunidad para una primera impresión”. Sí le ha gustado el gesto que ha tenido Juan con ella al regalarle el pañuelo, “el rosa es mi color favorito”, ha comentado Helena.
Después ha llegado el momento de sentarse a la mesa y empezar con la cena. Helena le ha contado a qué se dedica y Juan le ha explicado que había sido profesor de Educación Física, pero que ahora se dedicaba al teatro.
“Yo no podría vivir sin mi fe”
“No es el prototipo de hombre que a mí me gustaría a mi lado”, ha reconocido Helena. Ella tenía muy claro que Juan no es la persona que estaba buscando y más al saber que no era católico. “Yo no podría vivir sin mi fe”, confiesa Helena. Juan en cambio ha reconocido que no recuerda la última vez que fue a misa.
Han seguido con la conversación y Helena ha dejado claro que no se conforma con “una relación mediocre”. Este comentario no le ha sentado muy bien a Juan, que no se considera para nada mediocre “me considero alguien maravilloso”. Conforme se iban conociendo más cosas les separaban.
La invitación a los carnavales de Miguelturra
A Juan le gusta vivir en su casita en el campo e ir a la ciudad solo de visita, mientras que a Helena le gusta el campo “para tres o cuatro días”. Además, ella le ha confesado que es “cero bichos” y que no entiende a la gente que duerme con perros en la cama. Juan ha invitado a Helena a los famosos carnavales de Miguelturra, pero no cree que esta mujer acepte su propuesta, ya que él tiene cuatro perros en casa. “No creo que venga porque tengo perro y ella no puede ver a los perros”, ha bromeado Juan entre risas.
Helena no ha dudado en comentarle a su cita las “incompatibilidades” que les separan. También le ha dicho que le habría gustado que fuese un poco más arreglado a la cita. Juan le ha explicado que él suele vestir mucho más casual y ha sentido que no estaban en el mismo punto.
En el momento de la decisión final, los dos han admitido que no congeniarían como pareja. “No convivimos con las mismas ideas”, ha comentado Juan. Tanto el castellanomanchego como Helena reconocieron que lo han intentado, pero que sus mundos eran muy diferentes.
/Fotos: Mitele PLUS/