Manu Fuster nos tiene acostumbrados a hacer magia cada vez que se enfunda la camiseta del Albacete. El delantero se ha ganado el cariño y la admiración de la afición a base de trabajo, talento y goles, fruto de ello con sus 148 partidos con la casaca albacetista.
Manu ya ha escrito su nombre en los libros de historia del Albacete Balompié y, entre sus datos en estas cuatro temporadas, hay uno que destaca por encima del resto. Y es que cuando marca, el Alba suma.
En su cuenta particular, ‘El Mago’ acumula 26 dianas desde su debut con el Alba. En los 23 choques que Fuster ha visto portería, el conjunto manchego ha sumado 17 victorias y 6 empates. En la temporada 2019-2020, la de su debut, la carta de presentación del ‘10’ en el fútbol profesional fueron cuatro goles. Algunos de ellos vitales para la permanencia, como el tanto del empate ante el Gerona antes de la pandemia o el gol en El Sardinero que a la postre sería una victoria importantísima.
Al año siguiente, el rendimiento Manu se vio afectado por la mala dinámica del equipo que acabó perdiendo la categoría. Tan solo anotó dos goles, pero sirvieron para ganar al Zaragoza en el Carlos Belmonte y poner en ventaja al Alba en Vallecas un partido que acabaría en empate.
Pichichi del Albacete en Primera RFEF
Ya en 1ªRFEF, con el ‘10’ a la espalda y asumiendo la capitanía en numerosos encuentros, ‘El Mago’ desató todo su potencial siendo el pichichi del equipo, junto a Rubén Martínez, con 12 tantos y logrando el histórico ascenso en Riazor donde fue protagonista dando la asistencia a Alberto Jiménez en el primer gol manchego.
En su regreso a Segunda, con más experiencia y siendo uno de los estandartes del vestuario, Fuster acumula ocho goles en su cuenta personal que han servido para llevar al Alba a pelear por el sueño de disputar un Play Off de ascenso a Primera División.
Con 148 partidos a sus espaldas, cada vez nos deja más atónitos con sus trucos.