Se está liando la vida política, además de una forma morrocotuda. Nos merecemos serenidad, sentido común y que las medidas que se vayan tomando sean acordes al sentir general. Escuchar, leer y seguir la última hora de los medios de comunicación la mañana del viernes era como si se hubiese producido un suceso muy grave y a cada instante se estuviese facilitando la última hora. Contentar a los independentistas con la remodelación del delito de malversación no es de recibo, es una indecencia, desde mi punto de vista. Tampoco hay que condenarlos de por vida, hay que ser muy respetuosos con los que piensan de otra forma, pero se tienen que mover en el marco de convivencia que nos hemos dado todos. Existen unas normas y si se traspasan inadecuadamente existen unas leyes que son iguales para todos y cuyo peso debe recaer sobre quienes las vulneren y además de una forma implacable. Conforme sigo escribiendo este artículo, casi percibo, que, relatando obviedades puedo hacer el ridículo y a estas alturas no es mi deseo porque además no tengo que contentar a nadie. Además, otras personas más doctas, que las hay, seguro que estos días lo van a explicar muy bien. No me valen aquellos que viven de arrimar el ascua a una sardina, la que sea, porque así se vive más calentito y en navidades pueden comer buen marisco, a costa de los que no podrán ni probarlo. A esos, el secreto está en detectarlos y no hacerles ni puñetero caso. A mí tampoco, si quieren. Lo que sí deseo trasladar hoy, es lo que escucho a la gente corriente, esa mayoría que a veces llaman silenciosa, como si fuese tonta, pero que se entera de todo con una clarividencia fuera de lo común.
Es muy sencillo: la gente quiere que los que piden la independencia y además lo hacen de una forma tumultuosa sean juzgados y condenados en su caso; la gente que no sabe, en muchos casos, como se eligen a los representantes de los jueces desea que los partidos se abstengan de darle un tinte político a esas instituciones y que sean los propios jueces los que se elijan entre ellos; la gente quiere que se cumplan las leyes y si hay que cumplir las leyes, lo hagan todos, sin alegar que lo hacen por el bien de España; la gente quiere que los que administran mal los dineros públicos sean juzgados y condenados si procede; también quiere la gente que devuelvan lo robado o mal administrado, algo que nunca sucede; la gente quiere que un condenado de cárcel no sea indultado porque su nombre sea más “honorable” que otro y así un amplio alegato de circunstancias que todo el mundo entiende. No hay que ser de derechas, ni socialista, ni sindicalista, ni comunista, ni de El Bonillo para entender cuestiones tan básicas.
No vale todo para perpetuarse en el poder. Un PSOE potente, que lo es, puede y debe convocar elecciones para explicarle muy bien a la gente lo que quiere y cómo lo quiere. De esa forma se pueden ganar elecciones. Cualquier partido serio debe aspirar a gobernar, con los votos suficientes, sin tener que claudicar ni doblar la rodilla ante nadie. Lo que tuvo que hacer Aznar con el honorable tampoco fue acertado. Miren donde está Pujol y hasta Aznar. No es lo mismo pactar la salida de la Guardia Civil de tráfico de Cataluña con un partido nacionalista, que, con Bildu en Navarra, por mucho que esté en los estatutos. Ahora mismo, me ponen delante a Pujol y a cualquiera de Bildu y no sabría decirles por quien siento más repulsión.
Se hablará muchísimo también de los nombramientos del Tribunal Constitucional y ojala se ocupen un poco, todos, de la vida de la gente porque solo de reformas penales y de nombramientos de tribunales no vive el personal, por muy importante y necesario que sea todo.
Muchos socialistas se están dando cuenta que cada día que pasa están más a la deriva y van camino de un desastre electoral sin paliativos. Page levanta la voz, eso es indudable, pero ya veremos si es suficiente y si va a ser necesario ir pasando a la acción. Como no voy a tener la oportunidad de que me lo explique, no entiendo cómo el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, el del aumento del 8,5% de las pensiones se mete en estos líos para lograr una unanimidad en su contra brutal.
¿No se están dando cuente del deterioro de la política? ¿No se están dando cuenta del descredito de los políticos? ¿Tan difícil es?
COSAS QUE PASAN
Mientras tanto, Valdeganga es elegido “el pueblo más bonito de Castilla-La Mancha 2022”. Es para alegrarse, de que así sea. Conozco a personas de Valdeganga que son estupendas y a las que tengo gran afecto. Para darle más pompa CMM retransmitirá las campanadas de fin de año. Enhorabuena a todos.
Aquí en El Digital de Albacete me entero de que la Diputación de Albacete va a cerrar este año con una deuda de unos 4 millones de euros. La importancia radica en que en 2015 la deuda era de 50 millones de euros. Además, dice su vicepresidente, Valera, que el objetivo para 2023 es cerrar el año con una deuda de dos millones y medio de euros. No cambien el modus operandi, ni de gestores, van muy bien, la institución es una balsa de aceite, sin ruido, sin algarabías y la oposición a punto de ser canonizada. Porque las elecciones son sagradas, pero habría que declararlos exentos de contienda electoral. Al margen de chascarrillos y del tono navideño, gestionar bien debe ser siempre una obligación.
Mientras tanto Arrimadas, la que todavía anda proclamándose lideresa de la nada, dice que a Pedro Sánchez hay que pararle los pies y que “España no tiene un presidente del gobierno, sino un aprendiz de dictador”. Estos incompetentes de la política, como esta señora, con currículos susceptibles de mejora, que nos salen muy caros, primero incendian y después sacan la manguera. Desde 2016 existe lo de los micromecenazgos del Cultural Albacete. Creo que fue cosa del alcalde en aquel momento, Javier Cuenca y del presidente de la Diputación, Santiago Cabañero. Nunca es tarde y ahora los de Cs de Albacete se han percatado del asunto y a falta de unos meses para las elecciones se han apuntado a la cuestión. Como dicen Beléndez: “encima desgrava”. Pues estupendo, felicidades a todos y a todas.
Leo a Rafael López Cabezuelo con motivo del fallecimiento de la que fuera concejala Ana Quintanilla. No la traté, aunque sí la conocía y sabia de sus desvelos para que nuestras calles fueran más accesibles. El recuerdo para “Anita” de Rafa es sincero y tremendamente afectuoso. Otras personas, como el alcalde de Albacete la han tenido presente en sus mensajes.
Aún seguimos pensando si se corrige la ley del sí es sí. Un buen número de delincuentes sexuales excarcelados, oros tantos agresores sexuales con rebajas de pena. ¿Cuesta tanto rectificar?
Dejaré para otro día lo de la abultada cuenta corriente de la alcaldesa del PP de Marbella. Acorralada hasta decir basta. Ya veremos como acaba el asunto, pero tiene mala pinta. Lo del marido de la vicepresidenta Calviño tampoco es un buen ejemplo a seguir. Patrimonio Nacional ficha al marido de Nadia Calviño como coordinador de marketing. Lo ficha una señora que fue secretaria de Estado de Economía de la vicepresidenta. Pues nada, sigamos.
Además de la sedición, la malversación, el Constitucional, a muchos trabajadores y a sus familias les preocupan noticias que circulan de trabajadores mileuristas que cobran, a veces tarde y que incluso suenan tambores de falta de liquidez para el futuro inmediato. A todo eso se le añaden, al parecer, expedientes absurdos de poca consistencia legal que luego se pierden en los tribunales. Seguro que los sindicatos tan atentos siempre a las injusticias y a estas cuestiones laborales andan muy preocupados buscando soluciones e incluso preparando las pancartas para salir a la calle. Una persona que cobra mil euros al mes está siempre en desventaja del que cobra tres mil (sueldos netos). Por tanto, es necesario que sobre los más desprotegidos se pongan todas las miradas y los esfuerzos legales y de todo tipo para que ahora en estas fechas tan entrañables sientan ese calorcito que a veces no tiene que venir de las calefacciones, aunque también. ¿Tan difícil es?
Leo que una persona -conocida, aunque no famosa- dice que hace poco en una ciudad española tuvo una comida con amigos y que al segundo plato comprobó que el único que no votaba a Vox era él. También es mala suerte. Mecachis.
Paso por la puerta del Casino Primitivo con la intención de ver el Belén de Globalcaja y a quienes me encuentro pegados a la cristalera fue a dos políticos tomando café, charlando amigablemente y después he tenido confirmación que no era dos, eran tres. No eran políticos cualesquiera, no no, además de los que uno puede decir que se lleva bien. Lo que no sé es lo que estaban tratando, seguro que interesante y de provecho. Volveré a ver el Belén que ahí seguirá.
Feijóo aconseja a Ciudadanos “despedirse” de la forma “más digna posible” porque su proyecto tiene cabida en el PP.
“No seas jamás humilde con los soberbios, ni soberbio con los humildes” (Anatole France).
Ángel Calamardo
Twitter: @AFCalamardo
