/El Digital de Albacete/
Continúa la lucha contra el COVID-19 en los hospitales, y también en los laboratorios donde profesionales sanitarios intentan dar con un tratamiento eficaz para poner fin lo antes posible a la pandemia.
Así, médicos de Yepes (Toledo) han encontrado un tratamiento eficaz contra el coronavirus. Una terapia con antihistamínicos que ha mostrado su efectividad en pacientes mayores de 80 años sin tener que lamentar muertes ni efectos secundarios.
La investigación, ‘Antihistamínicos y azitromicina como tratamiento para COVID-19 en la atención primaria de salud: Un estudio observaciones retrospectivo en pacientes ancianos’, liderada por el doctor Juan Ignacio Morán Blanco, ha sido publicada recientemente por la revista ‘Pulmonary Pharmacology & Therapeutics’. Este médico de cabecera junto a dos compañeras, Judith Alvarenga y Karina Villar, y varios doctores internacionales firman este estudio sobre la combinación de fármacos que ha reducido notablemente la mortalidad de sus pacientes con COVID-19.
«Hemos logrado que nuestros pacientes no fallezcan» aseguraba Morán a Antena 3, quien además sostenía que sus pacientes “se han curado” del coronavirus. Pese a todo, este doctor que desarrolla su labor profesional en el centro de salud de Yepes y en dos centros de mayores reconocía que “hay que hacer más estudios y que otros médicos prueben que esta combinación funciona contra el coronavirus”.
De este modo subrayaba que ninguno de estos medicamentos tiene importantes efectos secundarios y que “en 24 ó 48 horas los pacientes tratados con estos medicamentos se curan del coronavirus”. La combinación de antihistamínicos y azitromicina, un antibiótico empleado habitualmente para tratar anginas y faringitis, suponen un tratamiento esperanzaron en la lucha contra el COVID-19.
La investigación puesta en marcha por estos médicos en Castilla-La Mancha concluye que «el tratamiento precoz de los pacientes sintomáticos con COVID-19 con antihistamínicos y azitromicina, y la administración de antihistamínicos en pacientes asintomáticos y de alto riesgo, tuvo excelentes resultados en nuestra población reduciendo la tasa de letalidad, los ingresos hospitalarios y los ingresos a UCI «.