/Marta López/Fotos: Ángel Chacón/
Durante su visita al colegio ‘Alcalde Galindo’ en Chinchilla de Montearagón, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, adelantaba que este mismo martes, 15 de diciembre, el Gobierno regional “aprobará el Decreto que va a regular todas las navidades”.
Un Decreto, que según el presidente de Castilla-La Mancha tendrá “un doble mensaje”. El primero de ellos será de “responsabilidad, ya que estamos viendo el final del túnel, motivo por el que ahora no se puede relajar nadie”, exponía en relación con las medidas restrictivas que forman parte de nuestro día a día desde el pasado mes de marzo. Así, destacaba García-Page que “ahora más que nunca parece incomprensible que se relajen las medidas y que se produzcan más contagios”, por lo que animaba a la ciudadanía a “aguantar en este último tramo antes de empezar con la solución: la vacuna”.
De este modo sostenía que “pasaremos una Navidad entrañable, obligados a que sea probablemente la más familiar de la historia”. Además, indicaba que en estas fechas será preciso “guardar el mayor reposo, sosiego y serenidad de cara a que se puede pasar bien y disfrutar”, pero apuntaba que “lo que más se debe disfrutar es de que el virus haya pasado por nosotros sin habernos rozado”, al tiempo que reconocía “será momento de recordar a toda la gente que nos ha dejado con ocasión de esta desgracia”.
Así se mostraba confiado en que “antes del verano la mayoría de la población de Castilla-La Mancha esté vacunada contra el coronavirus para afrontar la Semana Santa en un régimen más abierto”. Además, consideraba el presidente del Ejecutivo regional que “en el momento en el que circule la vacunación iremos en progresión, sin reducir la responsabilidad”, pero sí las restricciones que ha traído consigo el COVID-19.
