/@NachoLopezAB/
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El diestro de Tobarra se encuentra ya en su domicilio y solo piensa en empezar a preparar en el campo la temporada del año que viene
Tal y como el propio Rubén Pinar ha manifestado al micro de El Digital de Albacete, se encuentra prácticamente en perfectas condiciones. “Me encuentro bastante bien. Ayer jueves me dieron el alta y la verdad es que todo el proceso ha ido fenomenal y yo me encuentro muy bien”.
Con la ilusión por bandera y tras sus dos grandísimas tardes en la pasada feria de Albacete, Rubén Pinar volvía a Las Ventas para demostrar en la catedral mundial del toreo su valía y en vez de salir por la puerta grande, salió por la de la enfermería. “No hubo suerte y la corrida no ofreció ninguna facilidad. Había que mostrar actitud y tuve la mala suerte de que me hirió mi segundo toro, era un toro muy difícil y había que ponerse por los dos pitones y hacerle ver a la gente que el toro no valía. Me dio dos cornadas, pero la grave fue la del muslo derecho. Fue una cornada fuerte”. “Era mi último compromiso de esta temporada e iba a Las Ventas con toda la ilusión y las ganas del mundo. Aunque no pude sacar un triunfo, sí que fue una demostración de intenciones”.
Como torero que es, Rubén está hecho de otra pasta y ya está deseando montar los trastos de torear. “Ahora toca recuperarse y enseguida empezar a trabajar duro durante el invierno en el campo para preparar la temporada que viene, que yo creo que a poco que acompañe la suerte y el toro, puede ser una temporada importante”.
